Dentro de mí

Fíjense que con esté escrito de E. Nandino me vienen a la memoria ciertos pasajes que me ha tocado vivir al lado de personas que estimo mucho, pero también se refiere a la parte personal a la parte interior de cada uno, hay veces en las que muchas veces nos pasa algo y simplemente no sabemos como afrontarlo. Aunque no tenga nada que ver me acuerdo mucho de algunas rolas de keane, si me preguntan cuales seguramente no les respondería con certeza por que son bastantes que me gustan, pronto haré una selección de rolas del sello oscareque records (así que lo voy a subir para que se lo descarguen) ya después les paso el tracklist.

Dentro de mí existen muchas cosas que me hacen seguir adelante, con sus respectivos tropiezos y con consejos que son los ganadores indiscutibles, éste último año ha sido fructifero y en retrospectiva creo que fué buena elección ya que no me arrepiento haber salido del terruño y aunque a veces se extrañan tantas cosas es mejor tenerlo presente a estar pensando que estará pasando.

Jaja y que les cuento me toco ver algo insólito, cuando salí de trabajar se veía el cielo negro, en algunas ocasiones se llegaba a ver de un tono gris azulado y al poco rato que se suelta la lluvia con un gran poder... no tardo en granizar y eso de que caiga el granizo si duele (con todo y que estaba resguardado), al momento que se calmo avance a paso veloz por aquello de que volviera a caer más fuerte, dicho y hecho avance un par de cuadras y que se suelta con más ganas, está vez más fuerte y cayó mas granizo al grado que la calle se veía blanca como si fuera una ligera capa de nieve, he de decir que nunca me ha tocado pisar la nieve pero algún día se me hará.

Ya antes de dejarlos con esté escrito del poeta jalisciense Elias Nandino les cuento que se chingó el medidor del gas y voy a tener que cambiarlo jajaja, en fin que le vamos hacer a mi se me hace que fué plan con maña pero solo me queda una cosa más por decir, ¡que viva el pollo, ah como jijos no!

Con los ojos
altamente asomados a la noche
contemplo las estrellas
y, dentro de mí,
en el río incansable de mi sangre,
las siento y las descubro
reflejadas,
luminosas y hondas,
como si mi entraña fuera
el mismo cielo
en donde están ardiendo.