Estando bajo la lluvia pienso en las propiedades del agua; en el sentido más alla de ser agua simple, en lo que piensan las personas cuando caminan, corren, gritan y demás cosas cuando llueve.
La mayoría lo ve como un fastidio, la causa de llegar tarde o una barrera, pocas ven la ventaja de disfrutar un café, subirle a la música, abrazar, agarrar un libro o simplemente querer.
Si el agua se puede unir gota con gota ¿por qué los personas no?
El ego de ver más alla nubla lo que se tiene cerca; el agua bien separa lo que está más lejos o junta al grado de verse a los ojos.
Pensándolo bien, que maravilla es ver llover. Hace no mucho aún se podía ver la lluvia a través de los cristales; hoy es difícil prestarle atención, si tan solo se levantara la vista de vez en cuando nos daríamos cuenta que la lluvia saca lo mejor o lo peor de nosotros.
La lluvia se ve por fuera, pero muchas veces también se lleva por dentro.
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